miércoles, 15 de julio de 2009

tomate

La danza de las vinchucas
se instala en un carrusel de niñitas lloronas.
Los insectarios brazos al aire,
Cantando el himno de despedida.

Que la salven!
Que la salven!

Que sepa que la clemencia existe!
Ayúdalos tacaño inspector celestial,
No los abandones, no les permitas que la fruta se pudra…

te acabo de ver pasar aburrido fantasma

Y el cerebro se va exprimiendo, como una manzana en una tela de seda
Comenzamos a irnos,
Muy despacio hacia el final:
A paso ligero, hoy me despido
Sucumbo ante la transacción de los sueños,
Ante la desarmada marcha de los momentos,
Ante los llamados, ante los sonidos.

Fantasmas oxidados
Ojos de arañas sangrientas,
Escupidas como el que escribe
En las manos de fuego de Lucifer …
Los que se armonicen los teclados,
En las guitarras sucias, en las tormentas multicolores.

Bienvenida luz roja

Este es el mejor lugar del mundo,
Dentro de la materia de mis ideas, lo palpable,
Lo tangible.
Sean agradablemente bienvenidos
Al desorden
El famoso concepto desorden…

Acordes punzantes inflamados
Como gargantas en invierno.
Hijos de blues, hijos de la saya
A donde vamos?
La última vez que hablamos
Terminamos tirados en el suelo,
Quedamos rompiendo las ventanas del arlequín.

lunes, 6 de julio de 2009

picada

Que lejos esta la ciudad y que lejos están los barcos que la adornan
El color de la vida ha cambiado de un celeste intenso a un frívolo gris sarro.

Hoy lamo las paredes de la caída,
Bebo una y otra vez la sopa hecha a base de metal,
Limpio mi frente y miro atrás,
Quizás porque es el único lugar al que pertenezco,
O porque todas las imágenes que plasme en las calles olor a pino chileno, en las casas ajenas, en los ojos de miles de personas ciegas, aun persisten en tener un aliento de vida, aun buscan estrechar su mano a cualquiera.

Esto de seguir sueños es como una cacería de piernas de caballos y de avestruces.
El frío va en busca de cualquiera, arremete y se va.

Imaginarme los abrazos y recordar las cosquillas que regalan.
Hablar de lo mismo con los árboles.
Ver ánimas en el viento helado que se pasea entre edificios depresivos y el hambre.

Echando a suerte a la vida, mirándola como es realmente, como es su verdadera trayectoria y como son las verdaderas caídas.

Reir, reir y reir.
Esperar, esperar, esperar a que el suelo llegue pronto.

que los veranos no pasen

Que los veranos no pasen.

Que el sabor de la hierba quemada aún habite tímidamente en mi boca.

Que el alegre gusto de las cervezas frías, deje de bailar lejanas danzas entre el recuerdo de la espuma y la ebriedad.

Que no se marchen las noches tibias, giratorias, raras… las etílicas risas y los ruborizados ojos del sonámbulo verde.

Que vivan las manos concentradas, esas que jubilosas envolvían al último suspiro de planta sativa, aquellas que se concentrában entre amigos y tardes calmadas. Que vivan las sonrisas ensambladas con el llanto, las discusiones escépticas como de filósofos modernos; que viva el vino menstruado del sagrado útero del Señor Jesús.

Que los veranos no pasen.
Que los inviernos pasen
Que la tristeza pase.

sábado, 4 de julio de 2009

ultimamente me he puesto muy color rosa, matemos al culpable

jueves, 2 de julio de 2009

poema

La porcelana es tu piel
La que curiosamente examino detrás de todo.
La veo, la imagino y me la explico:
Es el algodón de las constelaciones
Es la cama del sonámbulo y el grito del mudo.
Aun en tu cara se percibe el tibio aroma de las sábanas
Y la incomprensión que tendrás de mis poemas
Que en este momento
Son un gajo de luz que penetra
Habilidoso de entre mares abrumados de cenizas estelares.

Soy testigo, voy, y huelo las flores
Que dejan tus piernas de leche materna
En el tibio asfalto del mediodía.
Tú presencia, es el sonido de miles de tambores africanos
Dentro de mi acordeón de costillas,
Golpeando duramente el cuero que los conforma,
Llegando a provocar la catarsis de toda una tribu.

A la lejanía me revuelco en tu pelo de paja suave,
De mar manso, de eterno vuelo del cóndor.